Pensando en hacer las maletas

Fuente: INE

Esta cifra era la más sonada en el día de ayer no sólo en medios de comunicación, sino también se difundía por redes sociales, blogs y a través de la gente de a pie, por poner algunos ejemplos. Se trata de un dato que demuestra una vez más que la recuperación económica no está tan cerca como algunos presagian. Y con esta cifra, entre otros muchos temas, se replantea una vez más el fenómeno "fuga de cerebros" que ya casi más que por iniciativa propia se está convirtiendo en una obligación.

Irse de la patria, sin embargo, no es tan fácil como parece. Abandonar la familia, amigos y las comodidades a las que estamos acostumbrados no se puede decidir tan a la ligera. Pero quedarse en casa tras ver que nadie responde a tus curriculum o que sólo te ofrecen prácticas por lo que prácticamente tienes que pagar tú para poder realizarlas tampoco parece el mejor plan. 

Es por ello que me gustaría transmitir a través de este blog los diferentes caminos que se pueden tomar para pasar una temporada fuera de casa para aquellas personas que estén interesadas. Ante todo hay que saber que no es un camino de rosas, empezando por la burocracia a la que hay que enfrentarse, el cambio de idioma en la mayoría de los casos , la inversión inicial que suele ser bastante alta; y a ello se suman otros factores como la soledad, cambio de clima, desorientación... 

Este tema saca a relucir otra realidad como la de que aquellos jóvenes, entre ellos algunos compañeros, que deciden quedarse en España y emprender nuevos negocios basados en ideas innovadoras y con perspectiva de futuro siguiendo, en este caso, por su espíritu innovador o todos aquellos que tras gran insistencia han conseguido un puesto de trabajo en lo suyo porque creen en lo que están haciendo. 

Pero yo hablo de salir fuera de España una temporada por dos razones: la primera porque es una realidad evidente y la segunda por mi espíritu aventurero. 

¡BIENVENIDOS A ESTAS TIERRAS!